Historia de la terapia Gestalt
La terapia Gestalt es un enfoque de psicoterapia que tuvo sus orígenes en la década de 1930 en Alemania.
Fue desarrollada por los psicoanalistas Frederick (Fritz) Perls y su esposa Laura, quienes tomaron el nombre y algunas influencias de la escuela de la Gestalt alemana, del psicoanálisis, de la fenomenología y del existencialismo, creando a partir de estos conceptos su propia síntesis de ideas.
La terapia gestáltica se ha nutrido de todas las líneas principales de desarrollo teórico en que se dividió el movimiento psicoanalítico original.
Aunque sus raíces provienen de la psicología de la Gestalt, no se orienta exclusivamente hacia ella: también recoge parte del movimiento psicoanalítico freudiano, de Otto Rank y de Wilhelm Reich.
La base que une a todos estos enfoques es la concepción de la pauta de satisfacción individual de necesidades como proceso de formación y eliminación gestálticas.
Como resultado, la terapia Gestalt integra conceptos de diversas disciplinas, entre las que se incluyen la psicoterapia corporal, el psicoanálisis, las filosofías humanísticas y existenciales, la psicología de la Gestalt, el psicodrama y las prácticas espirituales orientales.
Desarrollo de la psicoterapia Gestalt
En 1933, Laura y Fritz Perls tuvieron que huir de la Alemania nazi y buscaron refugio en Sudáfrica.
Fue allí donde decidieron establecer un instituto de formación psicoanalítica y comenzaron a desarrollar los principios fundamentales de la terapia Gestalt.
Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, el matrimonio Perls se trasladó a Nueva York, donde continuaron perfeccionando su enfoque terapéutico.
En su trabajo, combinaron conceptos de filosofía, política, estudios de relaciones interpersonales y medios artísticos.
En 1951, Fritz Perls, en colaboración con el visionario pensador social Paul Goodman y el psicólogo Ralph Hefferline, publicó su obra fundamental «Terapia Gestalt: Excitación y crecimiento en la personalidad humana».
Este libro revolucionario no solo presenta los principios fundamentales de la terapia Gestalt, sino que también cuenta con numerosos experimentos de autoterapia diseñados para ayudar al lector a adquirir una mayor conciencia del crecimiento personal y de la propia personalidad a través de la experiencia directa de este enfoque.
Fritz Perls le dio otro enfoque a la psicología humanista, pensando que el organismo tiene capacidad de autorregularse cediendo a una Gestalt, iniciándose con una necesidad, seguido de una toma de conciencia de ella (awareness), prosiguiendo con una excitación, después con el reposo para finalizar en una aparición de otra necesidad.
Dicho proceso comienza con un desajuste en el interior del organismo, que para poder reconocerlo es preciso entrar en su interior, procesarlo e identificarlo.
En dichas etapas pueden aparecer bloqueos, y superarlos es el objetivo de la terapia Gestalt.
Según este enfoque, la persona siempre ha vivido cumpliendo expectativas, deseos, mandatos, produciéndose de esta forma una Gestalt incompleta.
La neurosis es un síntoma de esa falta de maduración incompleta, que produce hueco en la experiencia y en la vida de las personas.
Alguien sano confiaría en sus sentidos integrando sus experiencias en el aquí y ahora y se alejaría de esos conceptos y prejuicios.
Para Fritz Perls, el ser humano es una Gestalt en sí mismo y al mismo tiempo parte de una Gestalt. Y con el tiempo la persona se ha vuelto fóbica al sufrimiento y al dolor, evitando todo aquello que le genera frustración, que no le resulta agradable o divertido.
Con ello se produce una falta de crecimiento y realización, ya que enfrentarse a la frustración y al dolor te lleva a un sufrimiento realista, que acompaña a tu crecimiento personal.
Terapia Gestalt en la actualidad
La terapia Gestalt es una forma avanzada de psicoterapia que busca integrar diferentes enfoques.
Se enfoca en la relación creada entre el terapeuta y el cliente, en lugar de solo observar al paciente.
Esta terapia se basa en la relación y el crecimiento personal, tomando inspiración de otros enfoques como la teoría del apego, la psicología cognitiva, la teoría de los sistemas familiares y el psicoanálisis relacional.
La terapia Gestalt se practica y enseña en todo el mundo, prestando atención a temas de identidad, diversidad de género y diferencias individuales.
En resumen, la terapia Gestalt ofrece una psicología práctica, integradora y respetuosa.
La Terapia Gestalt en España
La Psicoterapia Gestalt se estableció oficialmente en España con la creación de la Asociación Española de Terapia Gestalt en los años 70.
Su origen se remonta a ese mismo período, cuando se fundó el primer centro de psicología humanista en Madrid en 1973. Psicólogos destacados como Carl Rogers, Claudio Naranjo y Jean Michel Fourcade impartieron cursos y participaron en actividades relacionadas con la psicoterapia Gestalt.
La terapia Gestalt se caracteriza por su enfoque en la experiencia presente y la toma de conciencia del aquí y ahora. Busca la integración de emociones, pensamientos y acciones para promover el autoconocimiento y la autenticidad.
Con el tiempo, la terapia Gestalt ha ganado reconocimiento en España. Hay numerosos profesionales formados en esta corriente terapéutica en todo el país, así como escuelas y centros de formación especializados en Psicoterapia Gestalt.
Estos artículos te pueden interesar:
- Técnicas de Terapia Gestalt | Ejemplos y Ejercicios
- 5 Beneficios de la terapia Gestalt
- Terapia Gestalt Infantil [Niños y Adolescentes]
- Terapia Gestalt Grupal: Fortalecimiento emocional en grupo
- Terapia Gestalt de Pareja – Fortalece Tu Relación
- Terapia Gestalt Individual – Descubre sus beneficios
- Frases de Terapia Gestalt | Significado y reflexiones